El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha rechazado rotundamente la propuesta de que los expresidentes de México se conviertan en senadores al finalizar su mandato.
Esta propuesta fue presentada por el senador Alejandro Rojas Díaz, del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), quien sugirió una reforma constitucional para que los presidentes salientes se convirtieran en legisladores honoríficos, sin derecho a voto, modificando el artículo 56 de la Constitución.
Sin embargo, AMLO ha sido muy claro al expresar su desacuerdo con esta idea. Durante una conferencia, el presidente afirmó de manera coloquial: “zafo (estoy fuera). A mí que no me metan en eso, yo ya lo he dicho, soy un hombre con convicciones y de palabra, a mí me queda un año y 10 días, y yo ya termino”. López Obrador insistió en que, una vez concluido su mandato el 1 de octubre de 2024, se retirará completamente de la vida pública, sin aceptar ningún cargo ni nacional ni internacional, y sin participar en eventos académicos o políticos.
Además, el presidente anunció que cancelará todas sus cuentas en redes sociales y que no opinará sobre cuestiones políticas. En lugar de ello, dedicará su tiempo a escribir un libro sobre el pensamiento conservador en México, el cual espera publicar tres o cuatro años después de dejar la presidencia.
Esta declaración llega en un momento en que se le acusa de imponer a Claudia Sheinbaum como la próxima candidata presidencial del oficialismo, para influir en su gestión. A pesar de estas acusaciones, AMLO asegura que no intervendrá en asuntos públicos y celebra el “relevo generacional” que, según él, garantizará “continuidad con cambio”.