Los periodistas españoles David Beriain (Artajona, Navarra, 44 años) y Roberto Fraile (Barakaldo, Bizkaia, 47 años), que estaban desaparecidos desde este lunes en Burkina Faso después de que el convoy en el que viajaban por el este del país sufriera el ataque de un grupo armado, han muerto, según ha informado la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, este martes en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros. Ambos reporteros han sido asesinados en un ataque de un grupo de hombres armados que asaltó el convoy donde ambos viajaban.
González Laya facilitó las iniciales de los periodistas, D. B. A. y R. F. F., y aseguró que esperaba una confirmación final para determinar la identidad de los cadáveres hallados en la zona. Después, minutos antes de las cuatro de la tarde, el presidente del Gobierno ha publicado en un tuit las identidades y ha dirigido un mensaje de pésame a las familias de los dos periodistas: “Se confirma la peor de las noticias. Todo el cariño para los familiares y allegados de David Beriain y Roberto Fraile, asesinados en Burkina Faso”.
Se confirma la peor de las noticias. Todo el cariño para los familiares y allegados de David Beriain y Roberto Fraile, asesinados en Burkina Faso. Y nuestro reconocimiento a quienes, como ellos, realizan a diario un periodismo valiente y esencial desde las zonas de conflicto.
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) April 27, 2021

David Beriain tenía una amplia experiencia como reportero en zonas de conflicto. A lo largo de su carrera periodística había trabajado en Irak, Afganistán, República Democrática del Congo, Sudán, Libia, México, Colombia o Venezuela. Especializado en documentales, su reportaje Diez días con la FARC le valió en 2009 el premio de periodismo digital José Manuel Porquet, mientras que su documental El negocio del secuestro en Venezuela fue nominado en 2019 a los premios RealScreen. En EL PAÍS publicó trabajos sobre las zonas cocaleras de Perú.
El cámara Roberto Fraile, afincado en Salamanca, también era experto en zonas complicadas. Resultó herido en la localidad siria de Alepo por el estallido de una granada. Uno de sus trabajos más conocidos, junto a David Beriain, fue Clandestino, una serie de documentales que se emitió en el canal Discovery Max.
Burkina Faso se ha convertido en los últimos años en uno de los países más afectados por la violencia yihadista que desangra al Sahel. Desde que tuvieron lugar los primeros ataques en 2015 hasta la actualidad se han registrado unas 5.000 víctimas mortales, la mitad de ellas en 2020 según los datos de la ONG Acled, y más de un millón de desplazados internos. La violencia penetró en Burkina Faso desde la vecina Malí por el norte del país, afectando sobre todo a la región del Sahel, pero se extendió con rapidez hacia las regiones de Norte, Centro-Norte y Este, llegando incluso hasta el sur. Los principales grupos yihadistas que operan en este país son Ansarul Islam, sobre todo en el norte, y el Estado Islámico del Gran Sahara (EIGS), asentado en la vecina Níger, pero muy activo en el este de Burkina Faso.
David Beriáin y Roberto Fraile han sido asesinados cuando preparaban uno de sus grandes reportajes sobre preservación de la naturaleza. Pese a nuestra tristeza, nuestro orgullo por su compromiso con las realidades más difíciles y olvidadas.
Que la tierra os sea leve, compañeros. pic.twitter.com/8cb5A5EBwq— RSF España (@RSF_ES) April 27, 2021
El último incidente violento en que se vio envuelto un español en Burkina Faso tuvo lugar el 15 de febrero de 2019, cuando el misionero español Antonio César Fernández Fernández fue asesinado por un grupo de yihadistas que atacó el puesto de aduanas de la localidad de Nohao, en el sur del país. El salesiano regresaba por carretera a su domicilio en Uagadugú después de haber participado en un encuentro en Lomé, la capital de Togo.